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1 comentarios
Darius 22
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En esta edición he intentado corregir algunos fallos de la anterior, como la anatomía, perspectivas, y sobre todo, el exceso de tramas que a veces dificultaba la lectura. Espero que os guste.


Veamos qué se puede contar...

Sobre Nagano ya os hablé en el anterior capítulo. Es un sitio comparable a los pirineos españoles, muy bonito, muy agreste, con mucha nieve y donde se celebraron los juegos olímpicos de invierno en 1998. También es un sitio precioso y muy tradicional que he tenido el placer de visitiar y que recomiendo visitar siempre que me preguntan.

En la prefectura de Nagano se encuentra el parque de Jigokudani (地獄谷公苑), traducido como "el valle del infierno" (si en serio) . Se le llama así por su gran cantidad de fuentes de aguas termales, que proyectan nubes de vapor hirviente desde grietas en la nieve, y rodeado de afilados acantilados y escarpadas colinas y con densos bosques muy fríos y hostiles debido a sus ahora decrecientes poblaciones de jabalíes y osos, entre otros.

Es muy famoso por su gran población de macacos japoneses que se bañan en los rotenburo (pozos de aguas termales al aire libre) para calentarse.


Alguno quizá los conozcáis por "el hormiguero" como "los monos con pezones como gorros de gnomo"

Originalmente los monos no se bañaban, pero hacia 1963 aprendieron a hacerlo a base de observar a los humanos que lo hacían. Curioso, ¿no?

Los macacos japoneses generalmente no son violentos para el hombre, pero son curiosos y traviesos, y pueden volverse peligrosos si son incitados.


¿Alguna pregunta? ^-^

Darius 10/10/2012 01:48:18   
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